El último fin de semana de abril de cada año celebramos en todo el planeta el Día Internacional para la conservación de los anfibios. Este próximo sábado 27 de abril, por tanto, estará dedicado a la concienciación sobre el problema de la conservación de esta clase de animales, la más amenazada de todas las existentes a nivel mundial.
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Sapo común (Bufo bufo).
Globalmente, los anfibios están sufriendo un colapso generalizado de sus poblaciones, debido fundamentalmente a la desaparición de sus hábitats acuáticos, la contaminación de las aguas y, muy especialmente, a la expansión de un hongo - el Batrachochytrium dendrobatidis - que está provocando la desaparición de especies y familias enteras de ranas, sapos, salamandras y tritones por todo el planeta a un ritmo vertiginoso. Muchas especies de anfibios ya solo se conservan y reproducen en laboratorios y recintos ex situ, mientras otras han desaparecido ya totalmente de la faz de la tierra para siempre.
Rana común ibérica (Pelophylax perezi) en la balsa de la sierra de La Muela.
En la Región de Murcia, la situación se agrava al encontrarnos en un entorno semiárido, al borde del desierto, con cursos de agua intermitentes e irregulares y en donde la transformación de los usos y actividades del territorio se ha llevado por delante numerosas construcciones tradicionales asociadas a la cultura del agua, como aljibes, acequias, abrevaderos de ganados o balsas tradicionales de riego que constituían el hábitat de numerosas especies de anfibios. En la actualidad, en la Región de Murcia, la situación de muchas especies de anfibios es límite, habiendo desaparecido ya algunas especies - como la ranita lisa meridional (Hyla meridionalis) - y encaminándose a la extinción otras.
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Los anfibios del Campo de Cartagena.
Cuatro son las especies de anfibios presentes en el Campo de Cartagena, dos de ellas siguen siendo relativamente comunes, las otras dos son bastante más raras. Hay además una quinta especie extinguida.
Rana común ibérica (Pelophylax perezi).
La rana común es una especie relativamente frecuente en nuestra comarca, estando presente en casi todas las estructuras acuáticas con curso y presencia de agua permanente, como balsas o estanques. Si quieres ver con facilidad ranas comunes puedes acercarte a las balsas de la Sierra de La Muela o de la fuente del Cañar, donde crían todos los años.
Rana común ibérica en la balsa de sierra de La Muela.
El sapo corredor (Bufo calamita).
Sapo corredor en la rambla de El Portús.
Es el anfibio más común en todo nuestro territorio. En temporada seca, cuando ha pasado tiempo en que no ha llovido, es difícil de ver, ya que se oculta bajo piedras y rocas, saliendo al exterior en las épocas de lluvias abundantes. Es en estos momentos, cuando su presencia se hace muy notable alrededor de charcas y cursos de agua temporales donde se reúnen frenéticamente para reproducirse. Es frecuente encontrar entonces en estos lugares los rosarios de puestas de huevos y los renacuajos, los cuales completan su ciclo de metamorfosis en tiempo récord antes de que las charcas se sequen.
Sapo corredor en Calblanque.
Se denomina a este anfibio sapo corredor porque, a diferencia de otros sapos y ranas que mueven simultáneamente las dos patas delanteras o traseras, éste camina alternando pata delantera derecha con pata trasera izquierda y pata delantera izquierda con pata trasera derecha, como hacen los mamíferos de cuatro patas.
Renacuajos de sapo corredor en una poza en el Parque Minero de La Unión tras las lluvias.
El sapo común (Bufo bufo).
Sapo común (Bufo bufo).
El sapo común es el mayor de los anfibios de nuestra comarca. Es mucho menos frecuente que los anfibios mencionados anteriormente, estando totalmente ausente del sector oriental de las sierras litorales y estando presente únicamente con algunas pequeñas poblaciones en el Parque Regional de la Sierra de La Muela, Cabo Tiñoso y Roldán.
El sapillo moteado común (Pelodytes punctatus).
El sapillo moteado
Sapillo Moteado común es un pequeño anfibio endémico de la Península Ibérica y Francia. En Cartagena estaba citado en varias localizaciones, como en Cobaticas, en el Parque Regional de Calblanque, donde, sin embargo, hace muchos años que no ha vuelto a ser visto. Actualmente está únicamente confinado a una pequeña charca existente en la falda del monte San Julián.
Charca del cabezo de San Julián donde se encuentra la única población cartagenera de sapillo moteado.
El gallipato (Pleurodeles waltl).
El gallipato es un anfibio endémico de la Península Ibérica y norte de Marruecos. Era el único anfibio urodelo (anfibios con cola, como salamandras y tritones) existente en el Campo de Cartagena.
La cita del gallipato en el Campo de Cartagena es antigua y no sabemos con exactitud la localidad exacta en la que se ubicaba esta citada población, pero muy probablemente se encontraba asociada a las tradicionales balsas de riego vinculadas a pozos y molinos de viento existentes antiguamente por todo el Campo de Cartagena. En la actualidad está completamente extinto de nuestra comarca, siendo además su situación en toda la Región de Murcia crítica, con una notable regresión de todas sus poblaciones.
Localizada una población reproductora de gallipato en Sierra Espuña
La conservación de anfibios en la Región de Murcia.
La principal amenaza para la conservación de los anfibios en la Región de Murcia la constituye la acelerada desaparición de las infraestructuras tradicionales de riego - balsas, aljibes, acequias, abrevaderos, etc. - de las que dependen los anfibios para su desarrollo y reproducción.
Entubamiento de acequias en la huerta de Murcia, una práctica nefasta para la conservación de la biodiversidad en general y, especialmente, para las poblaciones de anfibios.
Además, otras amenazas secundarias las constituyen la presencia de gatos domésticos y ferales, que esquilman sus poblaciones, así como las trampas en las que se convierten las nuevas balsas de riego con lonas de plástico así como piscinas, aljibes y balsas abandonadas de las que los anfibios no pueden salir. En redes sociales se han hecho últimamente conocidos grupos de jóvenes que se dedican al rescate de animales atrapados en estas estructuras. Os recomendamos que los sigáis en redes sociales.
Algunos compañeros de ARBA Cartagena - La Unión también han llevado a cabo este tipo de actuaciones de salvamento de anfibios y reptiles atrapados en los pozas y balsas que se llenan de agua tras las lluvias y de las que no pueden salir, como ocurre en algunas instalaciones del Parque Minero de La Unión.
Balsa minera llena de agua en el Parque Minero a la que se le añadió un tablón para facilitar la salida de los sapos.
Sapos corredores atrapados en la balsa minera de La Unión.
Rescate de sapos corredores de la balsa minera.
Acciones de conservación de la administración regional.
En los últimos años, la administración regional, consciente de la gravedad de la situación en la que se encuentran los anfibios en nuestro territorio, está llevando a cabo algunas actuaciones para la conservación de estos animales, especialmente, la construcción o reparación de estructuras hidráulicas para favorecer su reproducción.
Balsa construida junto a la fuente de El Cañar (Espacio protegido de la Sierra de La Muela, Cabo Tiñoso y Roldán).
Estructura para recogida de aguas pluviales en el entorno de las salinas de Calblanque para reproducción de sapo corredor.
Balsa tradicional de riego rehabilitada en el Cabezo de la Fuente de Los Belones (Parque Regional de Calblanque).
¿Qué hemos hecho en ARBA?
En ARBA Cartagena - La Unión hemos llevado a cabo algunas acciones de conservación de anfibios en nuestros proyectos.
El más importante ha sido el llevado a cabo en la sierra de La Muela, dentro del proyecto Fénix 'Restauración del área incendiada de la sierra de La Muela'. Este proyecto, patrocinado por ILBOC y la Dirección General del Medio Natural de la Región de Murcia, incluía la restauración de la antigua balsa de riego existente en la cumbre de La Muela que, por aquel entonces, en 2018, amenazaba un colapso inminente.
La balsa fue completamente vaciada, los renacuajos de rana común fueron extraídos y fueron reservados en grandes bidones acopiados junto a la balsa.
Se reparó la estructura con cal hidráulica tradicional, se dotó de una toma de agua a media altura que permitía el riego de nuestros árboles manteniendo siempre un volumen suficiente de agua para los animales, se construyó una rampa para salida y entrada de anfibios y otros animales y se dotó de un bebedero para aves forestales.
Rampa para anfibios.
Vídeo de la salida de agua en el bebedero de aves.
Además de esta actuación, en 2020, colaboramos con la iniciativa de un grupo de vecinos del municipio de La Unión, junto con el Ayuntamiento, en la construcción de una charca para anfibios en el recinto de la Maquinista de Levante. A esta charca fueron trasladados muchos de los renacuajos atrapados en la balsa minera mencionada anteriormente donde pudieron completar su ciclo y desarrollarse como individuos adultos.
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Algunas referencias:
La Opinión de Murcia: "Los anfibios de la Región de Murcia, camino a la extinción"