Panorámica del Parque Minero y el Sancti Spíritu. Fotografía de Santiago Valverde.
'33 EN VERDE' es el nombre del apasionante proyecto que nos disponemos a abordar en esta temporada 2019-20 en la Sierra Minera de Cartagena-La Unión. El título de 33 en verde hace referencia al denominado 'camino del 33', la senda minera que llevaba antiguamente a los trabajadores de la mina desde la ciudad de La Unión hasta el pueblo costero de Portmán.
Panorámica de la parcela que será objeto de restauración forestal. Fotografía de Santiago Valverde.
ARBA Cartagena, en colaboración con ANSE y el Ayuntamiento de La Unión acometerá la restauración de una parcela, propiedad del municipio de La Unión, en el corazón de la Sierra Minera, bajo la umbría del Cabezo del Sancti Spiritus, la mayor altura de toda la sierra.
Vídeo realizado por Juan José Carrillo el día que comenzamos la instalación del sistema de riego
La Sierra Minera de Cartagena-La Unión. constituye las
últimas estribaciones de los Sistemas Béticos hacia el este. Todas las cordilleras
Béticas conforman, por su posición geográfica y su extraodinaria diversidad
climática y geológica, el punto de mayor diversidad biológica de todo el continente
europeo.
Dentro de este punto caliente (‘hotspot’) de la
biodiversidad mediterránea, la Sierra Minera de Cartagena-La Unión se configura
como uno de los enclaves en los que se manifiesta esta diversidad botánica de
manera más relevante. En las sierras de Cartagena y La Unión confluyen tanto
especies de origen europeo como otras procedentes del continente africano, denominadas especies iberoafricanas, contando asimismo con un elevado número de endemismos –especies que sólo se
pueden encontrar en este lugar en todo el mundo-.
Entre estas especies
extraordinarias de las sierras litorales de Cartagena se puede destacar la
presencia del ciprés de Cartagena (Tetraclinis articulata),
una singular conífera cuyas únicas poblaciones continentales europeas
encuentran refugio en estas sierras, y que configuran un hábitat prioritario, el hábitat 9570, bosques de Tetraclinis articulata, que es el que queremos restaurar con
nuestra propuesta. Este hábitat ha sido objeto de varias iniciativas de conservación en los últimos años, como el proyecto LIFE Tetraclinis Europa, financiado por la Unión Europea para la recuperación de estos bosques en nuestros montes.
Ciprés de Cartagena (Tetraclinis articulata) en Atamaría. fotografía de José Antonio López Espinosa.
Dentro del espacio comunitario, los bosques de Tetraclinis articulata sólo se dan en las sierras de Cartagena, en los alrededores de Melilla y en la Isla de Malta. Se trata de un bosque extraordinariamente singular, ya que concentra numerosas especies endémicas y otras que son únicas en el continente europeo por proceder del norte de África. De esta manera, el ciprés de Cartagena es acompañado habitualmente por otras especies norteafricanas como el arto (Maytenus senegalensis), el cornical (Periploca angustifolia) o la tapenera de la Sierra Minera (Capparis zoharyi), así como por especies endémicas como la jara de Cartagena (Cistus heterophyllus subsp.carthaginensis).
Desde hace dos años, ARBA Cartagena está también trabajando en la recuperación de estos bosques iberoafricanos en el Proyecto Fénix de restauración ambiental del área incendiada de la Sierra de La Muela, donde, hasta el momento, llevamos introducidos más de 2000 árboles autóctonos.
Ciprés de Cartagena (Tetraclinis articulata) en Portmán.
El Sancti Spíritus – el monte bajo cuyas laderas nos
proponemos este proyecto de restauración ambiental- , con 431 msnm., constituye
la mayor altura de la Sierra Minera. El Sancti Spíritus forma parte de una
ventana geológica del sistema basal de las Cordilleras Béticas formado por
materiales extremadamente antiguos del Paleozóico lo cual confiere a toda esta zona una especial
relevancia, ya que se trata de algunos de los escasos suelos silíceos, sin presencia de cal, de todo el sureste.
Micaesquistos de la Cuesta de las Lajas. Fotografía de Flora Protegida.
Al mismo tiempo, la singular posición de las sierras
litorales orientales de Cartagena que se adentran en el Mar Mediterráneo hacia
el este, con agua del Mediterráneo y el Mar Menor tanto al sur como a levante,
hacen que este rincón del Campo de Cartagena disfrute de unas condiciones de
pluviometría bastante más generosas que las del sector occidental de las sierras
litorales. Así, se produce un gradiente de precipitación que va desde unos
exiguos 150 litros/m2 anuales en Cabo Tiñoso, el punto más seco en el extremo
occidental del municipio de Cartagena, hasta los 380 litros/m2 en el Cabo de
Palos, su límite oriental.
El hecho de contar con la excepcionalidad de unos suelos sin cal, así como una mayor disponibilidad hídrica, han determinado
unas especiales condiciones que han llevado a la Dirección gral del Medio
Natural a proponer parte de la vertiente norte del cerro del Sancti Spíritus,
en concreto la denominada ‘Cuesta de las Lajas’, como microrreserva botánica,
por la extraordinaria singularidad de sus comunidades botánicas, en especial de helechos,
propios de climas más húmedos y muy raros en la Región de Murcia.
Sin embargo, toda esta singular riqueza biológica resultó
brutalmente afectada por el impacto de la actividad minera desde
el siglo XIX. El Sancti Spíritus se encuentra en el corazón de la Sierra Minera
y concentraba las mayores y mejores vetas de mineral que habían sido explotadas
desde la antigüedad, por lo que ha sufrido el impacto de la actividad humana
con una enorme intensidad.
En la actualidad, nos encontramos con un espacio
profundamente degradado: La cubierta arbórea original del Sancti Spíritus ha
desaparecido casi por completo, quedando apenas retazos de lo que pudo ser en
su día, y en su lugar nos encontramos con un territorio casi completamente
arrasado, con depósitos de estériles mineros por todo el cerro, escombreras con todo tipo de residuos y especies alóctonas como eucaliptos australianos o agaves americanas.
Estériles mineros y eucaliptos en la parcela objeto de esta actuación.
Escombros en uno de los laterales de la finca.
Durante los tres próximos años abordaremos la restauración forestal de una parcela propiedad del Ayuntamiento de La Unión en la que recuperaremos el hábitat 9570 de Tetraclinis articulata.
Vista aérea de una parte de la finca. Fotografía de Santiago Valverde.
Plantaremos cientos de ejemplares de todas las especies mencionadas anteriormente propias del hábitat del cipres de Cartagena, como el arto (Maytenus senegalensis), el cornical (Periploca angustifolia), la tapenera de la Sierra Minera (Capparis zoharyi), palmitos (Chamerops humilis), el lentisco (Pistacia lentiscus), la coscoja (Quercus coccifera) y el aladierno (Rhamnus alaternus).
Vista general de la parcela 101 sobre la que vamos a actuar.Fotografía de Santiago Valverde.
Aprovechando las excepcionales condiciones de suelo sin cal y humedad, vamos también a introducir especies propias de carrascales, como la encina (Quercus ilex subsp.rotundifolia), el madroño (Arbutus unedo) y el labiérnago (Phillyrea angustifolia).
Labiérnagos (Phillyrea angustifolia), en el Sancti Spíritu, escasos metros más arriba de la parcela donde vamos a actuar.
Labiérnago (Phillyrea angustifolia), en el Sancti Spíritu. Los ejemplares que vamos a plantar proceden de semillas recogidas de los que aparecen en estas fotos.
Madroño (Arbutus unedo) cerca de la Sierra de La Muela.
Gracias a la colaboración del programa de recuperación de flora protegida de la Dirección general del Medio Natural, vamos a tener el privilego de poder participar en el programa de recuperación de una especie endémica en extremo peligro de extinción: La jara de Cartagena (Cistus heterophyllus subsp.carthaginensis).
Jara de Cartagena (Cistus heterophyllus subsp.carthaginensis), foto de uno de los tres únicos ejemplares silvestres que quedaban en 2015.
Podéis seguir informándoos sobre la recuperación de la flora de la Sierra Minera, en la siguiente entrada de nuestro blog.
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El proyecto de restauración forestal de la Sierra Minera se lleva a cabo en colaboración con la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE), el Ayuntamiento de La Unión y la Dirección Gral del Medio Natural de la Región de Murcia.
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